Encuentros con las Familias de Profesionales del Daño Cerebral II: La Historia de un Fisioterapeuta
El Comienzo de una Vocación
Cuando comenzó a estudiar la carrera de fisioterapia, no estaba completamente seguro de su decisión. Lo que realmente quería era AYUDAR a las personas a mejorar su vida, guiándolas hacia un camino de bienestar. Se preguntaba si la fisioterapia sería la mejor opción para lograrlo, o si quizás enfermería o incluso medicina podrían ser alternativas más adecuadas. Estas dudas lo acompañaron durante los primeros días de su formación.
Descubriendo el Alcance de la Fisioterapia
A medida que avanzaba en la carrera, se dio cuenta de la amplitud y versatilidad que la fisioterapia ofrecía. Desde la fisioterapia deportiva, que es más conocida, hasta la fisioterapia para artistas, descubrió que había muchas áreas donde podría hacer una diferencia significativa. Uno de sus sueños era trabajar para el teatro de la Gran Vía en Madrid, e incluso aspiraba a ser el fisioterapeuta de Ferrari. Siempre apuntaba alto, ya que conformarse nunca fue una opción para él.
La Sorpresa del Destino: Fisioterapia Neurológica
Aunque inicialmente no consideraba la fisioterapia neurológica, el destino tenía otros planes para él. Esta área, que en principio no estaba en su radar, se convirtió en su gran pasión. Ahora, se despierta cada día emocionado por ejercer un trabajo que lo apasiona profundamente.
Los Desafíos y las Recompensas de la Profesión
La fisioterapia neurológica es un campo desafiante. No puede evitar ponerse en la piel de cada uno de sus pacientes, viéndolos más como una familia que como meros pacientes. Sufre con sus recaídas y estancamientos, y celebra con entusiasmo cada pequeño avance. Esta empatía profunda le acarrea noches sin dormir, pérdida de apetito y lágrimas en la intimidad, pero también inmensa alegría cuando sus pacientes progresan.
La Dualidad de las Emociones
El sufrimiento que experimenta es real y profundo: noches sin descanso, preocupaciones constantes y una empatía que lo consume hasta encontrar una solución para sus pacientes. Pero, cuando los pacientes logran avances, su alegría es palpable. Llega a casa lleno de euforia, su cansancio desaparece y su conversación se llena de historias de éxito y superación, demostrando una alegría genuina por el bienestar de sus pacientes.
Un Corazón Enorme y un Talento Innato
Tiene un corazón enorme en el que caben todas y cada una de las personas con las que trabaja. Además, posee un sexto sentido para ejercer su profesión, destacándose como un profesional único y una persona excepcional.
Vivir con un Fisioterapeuta de la Clínica UNER
Vivir con él es una experiencia enriquecedora. Incluso los más pequeños de la casa comprenden la pasión y el compromiso que su padre tiene con su profesión. Como lo expresa un niño de 5 años:
La Visión de un Niño
“Mi papá es fisioterapeuta y me siento muy triste porque no puedo ir a su trabajo todos los días. Lo que más me gusta es ir a su trabajo porque es todo de jugar. Hay una colchoneta, un columpio y todas esas cosas. Los niños que están allí son mis amigos, como los de mi cole, y no les veo nada diferentes. Cuando voy de visita, juego con mis amigos en la colchoneta, con la pelota, los coches, al escondite… ¡Me gusta mucho el trabajo que tiene mi papi!”
Agradecimientos
Queremos agradecer a R.A.F y a E.G.L por compartir sus experiencias. También extendemos nuestro agradecimiento a E.A.G por abrir su pequeño corazoncito y contarnos su visión como niño.
